.las horas matan y luego mueren.






hacía mucho tiempo que no tenía esta palpitación, este vértigo desacompasado
en el estómago, estas ganas de trepar paredes e incendiar al agua.
hacía mucho que no me repartía la sangre, que los ríos de agua y sal se mezclaban
en un cauce desenfocado.
las luces, el trepanar del ritmo simbiótico, la pausa desquiciada,
previa a toda la
tormenta de la carne.
las puertas de un edén.
las puertas con bisagras del antiguo miedo repleto de herrumbre.


si me ocurriera cualquier cosa...
por si no nos volviéramos a ver.





















*

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Ive read this topic for some blogs. But I think this is more informative.

Anónimo dijo...

juajajajjajaa

qué bueno es reír en domingo.
qué bueno ser argentina





*

búlgaro dijo...

En el amor y en su visceversa.

Hoy: dia de iniciación y de Flashback tour.

Beso bella...

Anónimo dijo...

Siempre acompaña tu poesía!
Te dejo la lectura de un amigo q presentó su libro.

m. dijo...

Me encanta
me encanta lara-lá-lara-lá

jose dijo...

v.

Contact dijo...

querida v!



las horas
solo mueren en favor de las otras ,las siguientes
las mismas que van a terminar
su tarea en cada uno de nosotros.


te mando eso.

Julieta dijo...

Siempre hay quilombito en el jardín del edén y más cuando punza la carne.

Un beso grande. Un gusto encontrar este blog.
Salú!

Caleidoscopía dijo...

sofisticada V.
etérea, así.


(y besos desde otras tierras lejanas)


Emily

Mr. P dijo...

bienvenida a posmópolis...

















(risas)

INVERSA

exorcismos sencillitos

Mi foto
Creemos que el tiempo nos mata lenta e inexorable-mente. Pero además de eso; la hora, al consumirnos, muere también. -como el fenómeno de ciertos insectos- Las palabras exorcizan a las horas. Los dedos liberan al tiempo. El tiempo nos vuelve libres. *